Y esta quizá sea la mas larga para mi. Desde hace ya varios años en mi casa hay una tradición, y es que el día 30 me encargo de celebrar las pre-uvas con los amigos del barrio... Vienen todos a casa y aprovechamos el ensayo general de la Puerta del Sol para tomarnos todos juntos los lacasitos/conguitos y felicitarnos por el "no año nuevo"
Es nuestra particular manera de tomarnos las uvas juntos, ya que el día 31 estamos cada uno en casa con nuestros familiares y se hace realmente difícil que algún día coincida el poder estar todos juntos para este sarao en cuestión. Y, además, cada año que pasa el tema de la fiesta posterior va quedando mas en el olvido... Se pasa mas tiempo con la familia y menos tiempo de copas... si es que se llega a salir... Como cambian las cosas y los cuerpos eh?
Cuando os presentaba ESTOS cupcakes de churros hablábamos de este tema en concreto... Como salíamos casi según daban las campanadas y yo amanecía por casa ya bien salido el sol con un par de docenas de churros calentitos para el desayuno de mi familia, tras una noche loca de fiesta (que eso no significa que fuera la mas divertida de todo el año, ni mucho menos) y con el cerdito roto para poder pagarla (porque entre vestido, pelu, pago de la fiesta, accesorios, taxis... Jesús, casi que era mas caro que una boda!!!!!!!!!!!!!!!!)
Ahora ya esto, por supuesto, es solo fruto del recuerdo y totalmente impensable que se vuelvan a repetir estas historias... Como decía, los cuerpos no son los mismos... Y, además, la vida avanza.... No es mi caso, pero muchos amigos del grupo ya tienen bebes o están en dulce espera, con lo que estas juergas desenfrenadas están dejando paso a las noches sin dormir debido a lloros y cólicos..... Algo totalmente distinto, pero mas gratificante, me imagino... Dentro de nada el testigo que nosotros estamos dejando lo pillarán esos niños y serán los que disfruten de esas noches de locura y magia
Yo he de reconocer que, contra toda natura, para mi las fiestas mas familiares son estas... La noche vieja y el año nuevo, seguido por los Reyes, por supuesto. Debido a mi historial laboral, en el aeropuerto, tenía que elegir entre nochebuena y nochevieja para trabajar, y, como estamos hablando, yo siempre me decantaba por nochevieja por la fiesta posterior que traía... Como había gente de mas edad que prefería la Nochebuena para pasarla en familia, casi siempre cuadrábamos como queríamos.
Así que yo, desde bien jovencita, la Nochebuena la he pasado trabajando y la Nochevieja era cuando disfrutaba de la cena en familia todos juntos... Por eso para nosotros hoy es la noche de las noches!!!!!!!!. Y, para colmo, nosotros celebramos el año nuevo.... bueno, mas que el año nuevo lo que celebramos es el cumpleaños de mi hermano, que no tuvo a bien el niño nacer otro día sabes?, así que tenemos comilona también!!!!!!!!!!!!
Todavía recuerdo esas comidas de celebración tras dormir 3 horas nada mas... Cuando todavía todo te daba vueltas... Y tu madre te plantaba un platazo de callos delante de la cara para comer, seguido de una pularda rellena de segundo... Vamos ya!!!!!!!!!! y no nos olvidemos de esa tarta que, por supuesto, había que soplar y probar.... Que gran época!!!!!!!!!
Y bueno, si algo para mi evoca esta gran noche es el champagne, porque, si, nosotros somos mas de champagne que de cava... Y no es por pijerío ni nada de eso, simplemente... Es que nos gusta mas!!!!!!!! Y desde que conocimos el champagne rosado siempre tenemos una botella de cada en el conge para brindar tras las uvas. Con lo que no podía ser de otra manera que, para dar la bienvenida a este 2017 junto a vosotros, eligiera otra cosa.... Y el formato ha sido un Bundt Cake porque estaba deseando estrenar este molde Vintage Star que me regalaron para mi cumple mis amigos Goyo del blog I Cake 4 U y Kike:
Ingredientes:
250 gr. mantequilla sin sal
300 gr. azúcar blanquilla
4 huevos L
420 gr. harina trigo todo uso
1 cucharada de levadura
1 cucharadita bicarbonato sódico
1/2 cucharadita sal
285 gr. de champagne rosado
Colorante rojo wilton (opcional)
Preparación:
Precalentar el horno a 180º.
Engrasar un molde bundt de 25 cm. con spray especial de desmodado
Tamizar juntos la harina, la levadura, el bicarbonato y sal. Reservar.
Batir la mantequilla con el azúcar hasta conseguir un mezcla que haya blanqueado y obtengamos una textura cremosa.
Incorporar los huevos, ligeramente batidos uno a uno y batir hasta que esté totalmente integrado. No añadir el siguiente hasta que no se haya incorporado el anterior.
Incorporar un tercio de la mezcla de la harina y batir a velocidad mínima alternando con la mitad del champagne rosado. Luego echamos otro tercio de harina, la otra mitad del champagne y terminamos con el último tercio de la harina.
Si os gusta que tenga el color rosado del champagne, añadirle un poco de tiente rojo a la masa con un palillo y amasar solo hasta que el color se haya repartido uniformemente.
Volcar esta mezcla en el molde Bundt que teníamos engrasado, asegurándonos que la masa entra en todas las hendiduras del molde y que no tiene aire golpeándolo ligeramente sobre nuestra encimera protegida con un paño.
Hornear entre 50-55 minutos , o hasta que, al pincharlo con una brocheta salga completamente limpio.
Sacar del horno y dejar reposar en el molde sobre una rejilla durante 10 minutos. Pasado este tiempo, desmoldar boca abajo y dejar enfriar totalmente sobre una rejilla.
Como el tema del sabor champagne es un poco difícil de adquirir, he decidido calar el Bundt Cake en un almíbar. Mientras se hacía la masa, en un cazo, he puesto 100 gr de champagne y 25 de azúcar y he llevado a ebullición lenta, removiendo constantemente durante 5 minutos, hasta que el azúcar se ha disuelto por completo.
Una vez que hemos desmoldado el Bundt Cake, mientras está caliente, pintamos todo el mismo con ayuda de una brochita hasta que se acabe nuestro sirope.
Y listo para comer!!!!!!!!! el resultado me ha encantado porque, queda una masa realmente jugosa, y la combinación de un sirope con ese sabor junto con el dulzor del bundt cake es realmente fantástico!!!!!!!!!
Desde aquí quiero daros las gracias por acompañarme durante este año 2016, me habéis aportado grandes ideas, me habéis resuelto muchas dudas, me habéis apoyado en momentos duros y me habéis acompañado en los bueno... De todo corazón espero que este 2017 venga cargado solo de cosas buenas para todos y cada uno de vosotros, en especial salud, que, con el paso del tiempo, me he dado cuenta que es lo realmente importante... Pero como a mi me ha hecho la boca un fraile, también os deseo muchísimo amor, éxito y diversión... Y yo que lo vea junto a vosotros.
Que tengáis una gran despedida del 2016 y una mejor entrada en el 2017. Millones de besos.
