Cheesecake de cabra con melocotón

Hoy traigo un recetón de los gordos!!!!!!!!!!!!!!

Es recomendable tener la presencia de lácteos en una dieta equilibrada y saludable, por lo que el queso de cabra puede ser una perfecta elección frente a los de vaca u oveja.

En cada 100 gramos podemos encontrar 364 calorías, 22 gramos de proteínas, 30 gramos de grasa y 0’1 gramo de carbohidratos. Por supuesto, también nos aporta micronutrientes como vitaminas A, B, D, potasio, calcio y sodio. Sin duda, es un tipo de queso bastante proteico y con un buen aporte de calcio para fortalecer los huesos y prevenir problemas cardiovasculares.

Los beneficios que tiene éste queso los podríamos resumir en:

Es más fácil de digerir. Contiene menos cantidad de lactosa, caseína y sustancias grasas, por lo que es más fácil de tolerar en personas con problemas de intolerancias o problemas intestinales. Por supuesto, debes consultar a tu médico antes de introducirlo en tu alimentación habitual.

Aporta una alta cantidad de nutrientes. Es una buena fuente de vitamina A, D, K, potasio, hierro, tiamina, niacina y riboflavina. Asimismo, es recomendable en dietas bajas en sodio, por su bajo aporte en comparación con los quesos de vaca.

Contiene menos calorías, colesterol y grasa. Al tener menor sustancias grasas, el queso de cabra es más ligero y aporta menos calorías y grasas saturadas.

Es rico en probióticos y posee menos hormonas. Su alto contenido en probióticos mejora la flora intestinal y el sistema inmunológico. Asimismo, ayuda en la absorción del calcio y sintetiza la vitamina B. Es destacable también que tenga un bajo nivel de hormonas y aditivos, ya que los quesos elaborados con leche de vaca sí suelen añadirlos para su elaboración.

Mejora la memoria. Gracias a su contenido en fósforo, se mejoran las funciones asociadas a la memoria y la concentración. Es una buena idea aumentar la ingesta de este mineral en épocas de esfuerzo físico y mental para mejorar los resultados.

Debido a todo lo dicho anteriormente es un tipo de queso que he visto en auge y muy de moda en el entorno de la comida real. Está claro que con respecto a calorías no puede competir con un queso desnatado, pero es que aquí de lo que se trata no es de contar calorías, es de ingerirlas reales, no procesadas y sanas. Y ante igualdad de condiciones naturales, es mejor el queso de cabra que el queso de vaca

Es mejor porque nos aporta mas nutrientes e incluso menos calorías que el de vaca. Es muy alto en proteína, así que para los que hacemos deporte nos viene de fábula ese aporte. Lo que pasa que, como todo en esta vida, hay que comerlo con mesura, porque que tenga menos calorías no significa que no tenga y se pueda abusar… En esta vida no se puede abusar de nada.

Y así es que como llegamos a ésta cheesecake, tras ésta gran disertación sobre el queso de cabra que no sé si os habrá gustado, que he de reconocer que es la primera que veo con queso de cabra, así que eso fue lo primero que me llamó la atención cuando vi ésta receta en el blog de mi Cristina “Petit Fit” y que podéis ver AQUÍ. 

Al final el tema de la lista de pendientes por hacer es tremenda, y va creciendo día a día según te das una vuelta por las redes y ves las maravillas que hace la gente, que yo sea una gocha y una antojadiza no tiene nada que ver sabe? Jajajajaja, la cuestión es que no me da la vida para hacer todo lo que quiero.

Bueno, siendo justos se podría decir que si que me daría la vida para hacer eso, pero es que ya sabéis como es el mundo del bloggero, que la cosa no se termina en la decisión de la receta a realizar, hacer la compra, ponerse al lio y hacer el dulce…. No!!!!!!!!!!!!!!!!... Ahora viene la parte donde tienes que defender el dulce con tu vida para que nadie lo toque sin que las fotos estén hechas… Hacer las fotos (que ahora con la luz del invierno y un trabajo de 8 horas es mas que complicado)… Editar esas fotos… Y sacar tiempo para ponerte a escribir la receta de la obra de arte en cuestión.

Siendo sinceros, la vida sería mucho mas fácil para mi si omitiéramos la parte del blog, ahí si que me daría la vida para hacer muchos mas dulces porque generalmente mis recetas son sin complicaciones, sin un paso a paso eterno que te lleva dedicarle mucho tiempo y con una limpieza muy llevadera porque generalmente suele ser un bowl y la batidora… Pero… ¿Que se le va a hacer? Hemos elegido tener este rincón y hay que ser consecuente con eso

Y debido a ese retraso en la ejecución de la receta pues lo que me ha pasado es que me he quedado sin higos…. Al ser un producto tan de temporada, y de temporada tan corta, porque la verdad es que en el mercado están disponibles a penas un mes, pues me he tenido que buscar la vida para sustituirlo por otra cosa, y así nace mi versión con melocotón.

La verdad es que los higos secos para la base no eran problema, porque ahora para Navidad si que están disponibles y es mas, son como un producto típico, y como ya éste año hemos superado la barrera de lo increíble y tenemos en el super los productos de Navidad a la venta desde agosto pues…. Como que no era el problema!!!!!!! Pero claro, hacer la base de higo y que no acompañara con la fruta de encima pues no me parecía. Y da la casualidad que tengo en casa una bolsa de melocotones secos BIO desde hace cantidad de tiempo y los estaba deseando probar.

INGREDIENTES 

BASE

60 gr de melocotón seco.

60 gr de copos de avena suaves.

RELLENO

250 gr de queso fresco de cabra.

250 gr de queso crema proteico.

3 huevos talla L.

TOPPING

1 melocotón.

10 gr de nueces pecanas.

ELABORACION

Ponemos los melocotones secos de la base a remojo en agua caliente durante 20 minutos.

Precalentamos el horno a 160º con calor arriba y abajo.

Trituramos los copos de avena y los melocotones escurridos hasta formar una mezcla pegajosa.

Colocamos un papel de horno en la base de un molde redondo, introducimos la mezcla, la aplastamos para compactarla y dejamos enfriar en nevera mientras preparamos el relleno.

Para el relleno, batimos con unas varillas eléctricas a velocidad baja el queso crema con el queso de cabra.

Añadimos los huevos uno a uno y batimos suavemente hasta integrarlos, intentando no meter demasiado aire a la masa.

Sacamos el molde de la nevera, vertemos la mezcla de queso sobre nuestra base, ponemos por encima el melocotón pelado y cortado en gajos y las nueces troceadas.

Horneamos 1 hora a 160° o hasta que esté dorada por los bordes y al menearla tiemble el centro, apagamos el horno y la dejamos 20 minutos más, abrimos la puerta del horno y la dejamos otros 15 minutos, la sacamos la dejamos atemperar por completo y llevamos a la nevera durante mínimo 4 horas. Una vez fría del todo desmoldamos.

El resultado es alucinante, me ha encantado notar ese sabor potente y característico del queso de cabra en la cheesecake… Y queda con una cremosidad que es un auténtico deleite. 

En la receta original Cris le añade Stevia para endulzar… Yo no la he puesto porque no me gusta y he de decir que no la he echado de menos para nada!!!!!!! La tarta, además de mi chico la han probado 3 personas mas y todas me dicen lo mismo, que no se nota para nada que no lleva ningún tipo de endulzante…. De todos modos yo puse un cuenco con sirope de ágave por si a alguien le faltaba ese shot que se lo pudiera añadir.

Echando cuentas por encima y teniendo en cuenta que el molde es de 18 cms, me salen 10 raciones y cada una de ellas contaría con 180 Kcal aproximadamente.

Un besote enorme.

Bizcocho Carrot Cake

Hoy traigo otro clásico versionado de manera saludable

¿Conoces la historia de esta fantástica creación? La carrot cake, es un pastel dulce con zanahoria machacada mezclada en la masa. La zanahoria se ablanda en el proceso de cocción, lo que le aporta una textura densa y suave. Para conocer la historia de la carrot cake tenemos que remontarnos hasta la Edad Media. En aquella época, los endulzantes eran muy caros y difíciles de conseguir, por lo que realizar tortas y otros tipos de recetas de repostería resultaba algo complicado. 

Por ello, se extendió la costumbre de utilizar calabaza, zanahoria y remolacha, verduras excepcionalmente dulces, como endulzantes en la cocina. El uso de la miel y el azúcar blanco en el día a día, únicamente estaba al alcance de las clases pudientes y los conventos. Siglos después, los emigrantes la llevaron consigo a Estados Unidos, país en el que es una tarta estrella. Según la documentación que nos ha llegado, la popularidad del pastel de zanahoria resurgió probablemente en el Reino Unido debido al racionamiento durante la Segunda Guerra Mundial. La carrot cake es hoy en día, probablemente, uno de los postres más emblemáticos de la cocina norteamericana.

A pesar de su nombre, la Carrot cake se parece más a un bizcocho que a una tarta en la preparación: todos los ingredientes húmedos, como los huevos y el azúcar, se mezclan por un lado, todos los secos por otro, y luego se les añaden los húmedos. Además, la consistencia definitiva es mucho más densa que un pastel tradicional y tiene unas migas más gruesas. Hay muchas y variadas recetas para elaborar este rico postre: con coco, nueces, piña, pasas, limón, acompañado de crema de queso o glaseados.

En la actualidad tenemos días para conmemorar de todo, desde el día internacional del Sida o del cáncer de mama, hasta los mas reposteriles, como el día del chocolate o el día del donut. ¿Sabes que la Carrot cake tiene su propio día conmemorativo?  El Carrot Cake National Day, es una cita que en EEUU celebran cada 3 de febrero y a la que cada vez se suma más gente, por si tú te lo quieres apuntar también en tu calendario.

He de reconocer que es una de mis tartas preferidas del mundo mundial, así que estaba deseando hacer su versión saludable para poder comerla con remordimientos. Y para mi la original y la tradicional es la que va con crema de queso, nada de glaseados, considero que el queso encaja mas con el sabor de la zanahoria y las especias

La receta de ésta maravilla la he encontrado, como no, ohhh sorpresa!!!!!!!!!!!!!!!!, en el Instagram de Roberto, el fantástico y maravilloso “Chef Bosquet” al que podéis seguir AQUÍ. De verdad que entre él y Cris de “Petit Fit” no me da la vida para seguirles el ritmo y hacer tanta inspiración y antojo, pero no puedo evitar hacer y hacer recetas suyas porque son delicias supremas.

De la receta original de Roberto solo hago dos apuntes. Yo no he echado jengibre porque tengo una relación de amor-odio con ésta especie, así que quería empezar probando sin ella y ver como quedaba de sabor y, como lo volveré a hacer ya probaré y compararé con ella. Y los anacardos yo los he puesto en crema en vez de enteros remojados porque considero que así se integran mejor a la masa.

Roberto también nos ofrece la posibilidad de ponerle la tradicional cobertura de queso que acompaña a éste bizcocho. La cosa es que tras hacer su receta del bizcocho saludable de mango que podéis ver AQUÍ. Quedé tan enamorada de la textura del bizcocho, de su jugosidad y de su sabor potente a mango que, en aquella receta, no quise ponerle la cobertura de chocolate para que no enmascarara su sabor.

Pues en éste caso me ha pasado lo mismo con la cobertura de queso… Una vez horneado el bizcocho es que lo vi… Ví su textura y su jugosidad, y estaba deseando probarlo sin nada que pudiera desviar la atención del sabor original. Mi consejo ahora es que hagáis la crema y la pongáis a parte, de ésta manera podrás tomarte el bizcocho añadiéndole ese toque si quieres… O no… O parte si y parte no!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Por si os apetece hacerla os dejo la crema que es tan fácil como mezclar 200 gr de queso crema (mascarpone, philadelphia o el que tú suelas usar) con 50 gr de crema de anacardo para mantener la textura pero aportando ese toque dulce. Y como topping, sinceramente, no creo que le haga falta de nada, pero si le quieres dar un poco de color yo optaría por espolvorear con canela de Ceylan y listo

INGREDIENTES

300 gr. de zanahoria picada.

100 gr de dátiles remojados y sin hueso.

4 Huevos talla L.

16 gr de levadura en polvo.

150 gr. de crema de anacardos.

1 cucharadita de canela de ceylan.

1 cucharadita de pasta de vainilla.

PREPARACION

Precalentamos el horno a 180 grados. Ponemos spray de fácil desmoldado en nuestro molde y reservamos.

Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la batidora y mezclamos bien hasta que se integre.

Lo echamos en el molde y horneamos durante 40 minutos.

En serio… No me diréis que hay alguna queja sobre ésta receta, es imposible conseguir mas por menos y el dicho de 2 minutos y hecho en éste caso se cumple a rajatabla!!!!!!! Os puedo asegurar que el resultado es impresionante, esponjoso, jugoso y a tope de sabor!!!!!!!

He echado cuentas y para 10 raciones hermosas que me salen serían unas 170 Kcal. Roberto nos dice que lo suyo serían 280 Kcal por ración pero claro, con el frosting.

Besines.

Pastel de pollo y queso

Hoy vengo con una inusual receta salada

Es verdad que de vez en cuando os he puesto por éste rinconcito alguna receta salada, a pesar de que ya sabéis que el fuerte de éste espacio es el dulce, pero cuando hago alguna cosa que creo interesante me gusta compartirla con vosotros. Generalmente han sido tartas saladas... Me pregunto porqué será!!!!!!!! jajajajajaja. En mi instagram os he empezado a dejar recetas saladas por las stories, y parece que están teniendo buena aceptación... Si queréis mas recetas saladas escribirme para hacérmelo saber.

Creo que un referente en ésto de la alimentación saludable es Carlos Ríos, al que podéis seguir en su instagram AQUI, y que tiene dos cuentas de instagram mas dedicadas a la comida real, la alimentación de calidad y los hábitos de vida saludables, los podéis ver AQUI y AQUI. Además tiene un libro sobre todos éstos temas llamado "come comida real" que creo lo deja todo bien claro, lo podéis ver AQUI.

A parte tiene un grupo privado en facebook, un negocio de nutrición y de seguimiento para ayudarte a iniciarte en éstos hábitos de vida... Yo he de reconocer que le admiro mucho. Es la única persona a la que realmente he visto decir las cosas como son le pese a quien le pese, por supuesto que entiendo que es su negocio y su profesión y que no hace ésto por amor al arte

Pero cuando le llega alguna denuncia por parte de un usuario, él la hace viral etiquetando a la marca sin ningún tipo de miedo e instando a que no nos dejemos engañar, todo ello con las pruebas que corroboran su punto de vista y el porqué de la crítica sin dejar margen a la duda. Y eso me motiva y me encanta, porque hay mucha gente que no se quiere mojar por ese famoso dicho de "hay que tener amigos en el infierno".

Porque si, la vida da muchas vueltas y no te quieres poner a nadie (entiéndase marca) en contra en éste mundo por si luego laboralmente te hace falta... Y hasta cierto punto lo puedo entender porque al final todo el mundo necesitamos trabajar para comer... Pero es que él va mas allá, es algo en lo que no cree y por lo tanto es algo con lo que no comulga y le da igual si tiene que pisar algún callo y decir verdades en vídeos e etiquetando a marcas 

Y eso me da mucha confianza, porque me da la sensación que pone por encima de todo el beneficio de sus usuarios y exige la claridad a las marcas para que no nos engañen, aunque luego nos da la libertad para hacer lo que queramos...Él solo pretende que sepamos lo que consumimos... Eso, para mi, es grande!!!!!!! Y, además, tiene un gran sentido del humor y su afición a los memes es legendaria!!!!!!!!!!!!!!!!

Y su última incorporación a su gran familia es la app para el móvil de "MyRealFood". El funcionamiento es que escaneas el código de barras del producto que quieres comprar y te indica si es un "buen procesado" o un "ultra procesado". Además, luego lo puedes añadir a tu perfil de seguimiento y llevar un control de tus comidas así como de tu nivel de ingesta de "ultraprocesados" (él recomienda un 10%). 

Y se complementa con diferentes grupos donde te puedes meter y hacer comunidad, buscar apoyo, motivación e ideas... La recomiendo totalmente, aunque me quita tiempo porque, al final, es como una red social mas. Yo estoy metida en los grupos de "recetas realfooding" y en el de "muévete", y del primero es de donde ha salido ésta receta, gracias a @healthykaty_es que es el perfil que lo posteó.

INGREDIENTES

2 huevos talla L.
1 yogurt natural 0%.
100 gr. de harina de avena.
1 pechuga de pollo (155 gr).
50 gr de queso rallado alto en proteínas.
1 cucharadita de levadura.
1 pizca de sal.
condimentos opcionales (ajo en polvo, cebolla en polvo, etc...).

PREPARACION

Precalentamos el horno a 180 grados. Ponemos spray de fácil desmoldado en el monde y reservamos.

Ponemos el pollo en un plato y lo hacemos al mkicro o al vapor, como prefiramos. Reservamos.

En un bowl, ponemos los huevos, el yogurt, la sal, la levadura y los condimentos que queramos, integramos bien con ayuda de unas varillas.

Añadimos la harina e integramos bien.

Echamos la masa en el molde reservado, ponemos el pollo cortado en trocitos por encima y el queso rallado.

Horneamos 30 minutos hasta que esté bien dorado.

Como véis, es una receta que me gusta porque se hace en un bowl, en cosa de 5 minutos y con una dificultad nula... Además es algo un poco original por el formato y la presentación.

La base me ha encantado, porque esa textura de bizcocho, pero que en boca sientas la explosión del sabor de la cebolla y el ajo es brutal!!!!!!! super original... Y recién saludo del horno, caliente, con ese queso fundido... Sin palabras!!!!!!!!!!!!!

Echando cuentas por encima el pastel entero tendría unas 850 Kcal, y es ideal para dos personas porque es contundente y sacia muchísimo... Y con esa mitad ya tendrías la comida completa.

Un besote enorme.

Bizcocho saludable de mango

Lo se, lo se, me ha dado por el mango 

Hace 10 días os enseñaba ESTE bizcocho FIT de mango cargado a tope de proteínas y que me pareció una forma ideal de tomarlas y usarlo como recovery. Lo único que no me gustó del mismo es que llevara edulcorante, porque ésta parte la quiero eliminar del todo de mi alimentación.

Esta receta encaja mas con mi forma de alimentación y cuando la vi en el Instagram de Chef Bosquet no pude resistirme a hacerla, a pesar de que fuera muy parecida a la anterior. Aunque si las miras detenidamente la verdad es que no tienen nada que ver. La otra es mas consistente y mas "para mojar". Ésta queda mas ligera y se puede tomar tal cual porque es muy jugosa.

Podía haberme decantado en realizar éste bizcocho con otra fruta (albaricoque o melocotón, que tienen unas características de textura muy similares al mango) pero como ya os dije, desde mi viaje a Sri Lanka me he aficionado mucho a ellos y, además, parece ser que ahora estamos en plena temporada, con lo que son frutos que te aseguras que salgan buenos.

Siempre que introduzco algo nuevo en mi dieta y, por ende, en mi vida, me gusta investigar un poco mas sobre ellos, sus aportes, sus beneficios y recomendaciones... Esto no hace que haga decantarme por consumirlos o no, pero desde hace tiempo me gusta saber bien que es lo que como y lo que me aporta, por eso investigo mucho en la red, y las propiedades del mango las he sacado de AQUI.

Fruto del árbol Mangifera indica, de la misma familia botánica que el anacardo y el pistacho, es originario de la región a los pies de los Himalayas, en el noroeste de la India, aunque encontró tierra fértil en todo el sudeste asiático, donde se cultiva desde hace más de 4.000 año. Desde allí se ha extendido a todas las zonas cálidas del planeta de la mano de monjes budistas y de comerciantes persas, portugueses, españoles e ingleses.

Casi todos los idiomas han incorporado a su vocabulario una derivación de la tamil (lengua del sudeste indio) "mangkay", que los portugueses transformaron en "manga" y los ingleses en "mango". Sin embargo, en la India se le conoce por el término hindi "aam", que significa "común".

No es extraño, pues es una fruta ubicua en el subcontinente, donde se produce tanta cantidad de mangos como del resto de la fruta junta.

Se estima que la India produce dos tercios de los mangos del mundo, unos 14 millones de toneladas anuales. Es por tanto el fruto nacional y está vinculado a mil y una leyendas.

La más celebre es la que lo relaciona con Siddharta Gautama, Buda, a quien se le representa casi siempre a la sombra de un mango de lozanía perpetua (el árbol puede alcanzar 40 metros de altura y 10 de anchura).

La razón es que Buda alcanzó la iluminación bajo un mango, al que desde entonces se conoce como "el árbol de la sabiduría" o "bodhi".

El mango destaca por el conjunto de nutrientes y sustancias antioxidantes que se hallan en su composición.

VITAMINAS C Y A

Una sola pieza de 200 g aporta la cantidad diaria recomendada de vitamina C (unos 60 mg) y el 60% de la vitamina A, en forma de betacaroteno. El mango es una de las fuentes más importantes de este nutriente.

FRUTA RICA EN VITAMINA E

Aunque la vitamina E, uno de los antioxidantes y protectores cardiacos más eficaces, suele encontrarse principalmente en los alimentos grasos, el mango posee una cantidad extraordinaria tratándose de una fruta. Una pieza de 200 g aporta 2,3 g, es decir, el 23 % por ciento de la cantidad diaria recomendada.

APORTA MAGNESIO Y POTASIO

En cuanto a su contenido mineral, destacan las proporciones de magnesio y potasio (en ambos casos, un mango proporciona el 10% de las necesidades diarias).

CONTIENE ÁCIDOS DEPURATIVOS

Además de nutrientes, el mango aporta otras sustancias con efectos beneficiosos sobre la salud. Los ácidos tartárico y málico ayudan a contrarrestar el efecto de los residuos metabólicos de naturaleza ácida.

La peculiar composición del mango previene las enfermedades degenerativas, especialmente los trastornos cardiacos, el cáncer y la diabetes (es rico en hidratos de carbono, pero no aporta tantas calorías como su sabor dulce puede hacer pensar: 100 g contienen solo 65 calorías con una buena dosis de fibra).

Los beneficios del mango son:

1. PROTEGE LA PIEL Y LAS MUCOSAS

Por su contenido en betacaroteno es útil para proteger la piel, las mucosas, los ojos y el corazón frente a la acción de los radicales libres.

2. MANTIENE HUESOS Y MÚSCULOS EN FORMA

La combinación de magnesio y potasio hace que el mango esté indicado para mantener en buena forma el sistema músculo-esquelético (previene desde la osteoporosis a los calambres musculares).

Asimismo estos minerales participan en el control de la presión arterial, favorecen la eliminación de líquidos y el buen funcionamiento de los riñones.

3. ALCALINIZA Y FLUIDIFICA LA SANGRE

Los ácidos orgánicos débiles que aporta el mango, una vez asimilados en el organismo, se combinan con minerales y dan lugar a sales que tienen la capacidad de fluidificar y alcalinizar la sangre.

4. FAVORECE LA ASIMILACIÓN DE NUTRIENTES

También posee enzimas con propiedades similares a las de la papaínas de las papayas o la bromelina de las piñas.

Estas enzimas propician la asimilación de los macronutrientes  y son en parte responsables de que el mango resulte tan fácil de digerir, tanto que se dice que "ablandan" y "purifican" el estómago y los intestinos. Por eso se recomienda a todas las personas que sufren problemas digestivos.

5. ESTIMULA LAS DEFENSAS

Los minerales y vitaminas antioxidantes, junto con los compuestos fenólicos, ayudan al sistema inmunitario a prevenir y luchar contra las enfermedades.

La quercetina, la isoquercetina, la astragalina, la fisetina, el ácido gálico y metilgalato tienen efectos antioxidantes.

6. EFECTOS DE LA FIBRA

El mango, como todas las frutas en general, aporta también una dosis significativa de fibra, que ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer, como el digestivo, evita el estreñimiento y baja el colesterol malo, lo que protege el corazón y el sistema circulatorio.

En Sri Lanka también tuve un primer contacto con el Ayurbeda, la verdad es que aprendía bastante sobre esta forma de medicina y recibí varios masajes basados en ella, así que ésta parte me ha parecido muy curiosa:

INDICACIONES SEGÚN EL AYURVEDA

Siendo la fruta que reina en la India, es interesante conocer las propiedades que le atribuye su medicina tradicional, el ayurveda.

Según esta sabiduría milenaria, el mango aumenta los siete dhatus o nutrientes corporales, que son la esencia de los alimentos, la musculatura, la grasa, la médula y el semen y la sangre.

Esto quiere decir que resulta de ayuda para el funcionamiento general del organismo. Más concretamente, en la India se utiliza para fortalecer el corazón, detener las hemorragias, tratar la anemia y las menstruaciones abundantes, depurar el hígado y perder peso.

Los terapeutas ayurvédicos utilizan incluso el hueso de la fruta, cuya decocción, de naturaleza astringente, es un remedio popular contra la diarrea, la cistitis, las hemorroides y las inflamaciones de la uretra, entre otros trastornos.

Madre mía, que no me pongo pesada ni nada con el tema de los beneficios y tal no? Espero que os resulte tan interesante como a mi, porque sino... Menudo bodrio.

Así que ya, si mas, os dejo la receta:

INGREDIENTES

300 gr de mango fresco.

3 huevos talla L.

150 gr de harina de almendra.

12 gr de levadura.

PREPARACION

Precalentamos el horno a 180 grados. Echamos spray de fácil desmoldado en nuestro molde y reservamos.

Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la batidora y trituramos bien hasta que se integren por completo.

Pasamos la masa al molde y horneamos unos 25 minutos a media altura.

Roberto nos da una cobertura de chocolate (fundir 50 gr de chocolate 85% o superior junto con 50 gr de leche) que yo no he hecho porque, sinceramente, no quería enmascarar el sabor con nada, me ha encantado disfrutar de ese sabor a fruta.

Como veis no lleva nada para endulzar porque mis mangos estaban algo pasados y ya eran suficientemente dulces de por si. Si los vuestros están maduros o poco dulces podéis añadirle dátiles o higos para darle esa chispa.

El resultado, de verdad, es una pasada... Super jugoso, esponjoso y con un sabor fresco y potente... Y se hace en 5 minutos!!!!!!! No se le puede pedir mas... Ah si!!!!!!!!!!!!!! que salen 8 raciones bien hermosas y cada una con 168 Kcal aproximadamente!!!!!!!!!!!!! Brutal!!!!!!!!!!!!!!

Besos.