Panes de leche rellenos de chistorra

Hoy vengo con otra receta semi-salada (ya que el pan es de leche :-P)

Y es que ya "amenacé" con que me había vuelto loca el blog de La Receta de la Felicidad y que haría algo mas de ella, y aquí está la prueba

La entrada con la receta es esta.

Mi experiencia ha sido mas o menos muy parecida a la de los panes con forma de cochinito... Trabajar la masa para mi es un horror, y muy cansado, quizá porque no tengo práctica y también quizá porque no tengo las herramientas adecuadas.

Pero esta vez he aprendido algo y a la hora de dividir y dar formas a los panes, "embadurné" bien la superficie de trabajo con harina y ha sido bastante menos incómodo que la última vez.

Como veis hay algunos con forma de trenza y otros como con forma de bollo. Según la receta original ella te da las instrucciones para que lo hagas con forma de trenza.

Lo que pasa que yo según lo estaba haciendo me daba la sensación de que con esa forma, cuando se calentaran, como que la grasilla del rellenos se iba a salir, ya que no cerraban herméticamente y quedaban algunas rendijas.

Como soy una ansiosa, pues el resto los hice con forma de bollo, cerrado.

A la hora de sacarlos del horno me dí cuenta que estaba totalmente confundida ya que como el pan sube al hornearse, pues todas esas rendijas quedan selladas, con lo que lo que suelta el relleno se queda siempre dentro y empapando bien el pan. Pero, claro, pudo el terror conmigo y ahora... Mira. De todo se aprende.

Un consejo, con el relleno, ser generosos, ya que, como he dicho, el pan cuando se hornea crece, así que dejar el relleno bastante potente, sino, una vez horneado, será poco relleno para tanto pan, me entendéis?. 

Este es el aspecto que tienen por dentro. Solo puedo decir una cosa... Espectaculares!!!!!!!. El olor de cuando se estaban haciendo es una tortura, así que esperar a que se enfríen algo cuando los sacas para probarlos, ni te cuento, pero una vez que llega ese momento... Calentitos como estaban... Super tiernos... De verdad, de pecado.

El resto, cuando te los vayas a comer, les das un golpe en el micro para que tomen temperatura y están... Igual de buenos que recién hechos.

Besines dulces.