lunes, 31 de diciembre de 2018

Bizcocho invertido de piña y cava

Otro año mas que se nos escapa entre los dedos!!!!!!!!!!!!!!!!


He de reconocer que me está costando mucho despedirme de este año... Ha sido un año especialmente bueno y entrañable para mi... Ha sido el año en el cual me he casado y la verdad es que no pudo ser una semana mejor, ya que los que me conocéis y seguís sabéis que mi boda no ha sido cosa de un día, han sido una semana de celebraciones.


Por otro lado he tenido un cambio en el trabajo y he de reconocer que a mi personalmente me cuestan mucho los cambios, de todo tipo, por eso llevo fatal estas cosas... Además es que ha sido un cambio de equipo y de ubicación... Pero he de reconocer que tras pasada la primera etapa de descoloque inicial, ahora estoy encantada con el cambio, y he de dar la razón a todas esas personas que me dijeron que tuviera paciencia y fé porque los cambios son para mejor.


Una vez pasada la boda también he podido volver a mi vida normal, porque, al final, entre tanto preparativo, he de reconocer que el último año y medio de mi vida se centró única y expresamente en la organización de todo. Y una cosa viene hilada con la otra... En mi nueva ubicación laboral tengo un gimnasio en mi mismo edificio donde he dado con grandes profesionales que me están llevando y tratando y donde poco a poco voy recuperando la forma y donde veo se van dando pasitos para conseguir el objetivo establecido.


Y no puedo terminar esta pedazo de chapa que os estoy soltando sin hacer mención a la vuelta del mundo de la repostería, que tanto eché de menos y que tantas alegrías me ha dado, y con la vuelta al gimnasio también me estoy adentrando en algunas recetas FIT y Healthy, eso si, sin dejar de lado las "gorduras" que tanto me pierden. 

Es cierto que he notado un bajón enorme en lo que es este medio, el blog, pero también he notado un aumento considerable en las otras redes... Esto no sé si tiene solo que ver con mi ausencia reposteril o es algo generalizado.... De lo que también me he dado cuenta es que Facebook esta muy de capa caída y que el futuro y la mejor red ahora para este gremio es Instagram sin lugar a dudas.... Vosotros que opináis al respecto?


Y por todas estas cosas que os he contado, y por lo especial que ha sido este año para mi, no cabía ser de otra manera que darle el adiós de una manera grandiosa. Y cuando vi la receta de mi amiga Ana del blog "Cook the cake" que podéis ver AQUI, supe que ésta tenía que ser la receta... Llevaba mil queriendo hacer un bizcocho invertido, y este que encima tiene como ingredientes el cava y la piña, productos tan navideños, supe... Que había llegado el momento!!!!!!!!!!!!! El mío no tiene tanto glamour como el suyo que está hecho con champagne, pero creo que está rico igual


INGREDIENTES

Para la masa

215 gr. de harina 
2 cucharaditas de levadura
¼ cucharadita de sal
85 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
200 gr. de azúcar 
2 huevos tamaño L
1 cucharadita de extracto de vainilla
90 ml. de jugo de piña 
30 ml. de cava

Para hacer la cobertura

4 rodajas de piña al natural
85 gr. de mantequilla sin sal
100 gr. de azúcar moreno


ELABORACIÓN

Precalentamos el horno a 190º C. Forramos el fondo de un molde desmontable de 22 cm. con papel de horno y engrasamos las paredes del molde.

Ponemos la piña en una fuente y agregamos el cava y dejamos macerar.

Primero vamos a preparar la masa, para ello mezclamos la harina, la levadura y la sal en un recipiente y reservamos.

Ponemos la mantequilla y el azúcar en el vaso de la KA y batimos hasta que la mezcla esté cremosa y haya aumentado de volumen.

A continuación agregamos los huevos de uno en uno dejando que se mezclen bien, antes de añadir el siguiente. Añadimos la vainilla y mezclamos.

Escurrimos la piña y la dejamos sobre un papel absorvente. Mezclamos el cava y el jugo de piña. Reservamos.

Bajamos la velocidad de la batidora y agregamos la mitad de la mezcla de harina, sin dejar de batir. A continuación incorporamos el jugo de piña y el cava y terminamos con el resto de harina, mezclando bien hasta que la masa esté cremosa y sin sobrebatir.

Para preparar la cobertura derretimos la mantequilla en un cazo y añadimos el azúcar moreno. Dejamos que hierva a fuego lento, mientras revolvemos constantemente durante unos 3 minutos.

Vertemos la mezcla de mantequilla y azúcar moreno en el fondo del molde. Colocamos las rodajas de piña sobre la mezcla. Añadimos la masa sobre las rodajas de piña y la extendemos de mantera uniforme.

Horneamos de 50 a 55 minutos aproximadamente, o hasta que insertando un palito en el centro, éste salga limpio.

Dejamos enfriar 10 minutos sin desmoldar y posteriormente pasamos el bizcocho a un plato o cake stand para servirlo. Se puede tomar templado o frío.


Espero que tengáis una gran salida de año, que lo paséis genial en compañía de vuestros seres queridos, y que el 2019 venga cargado de cosas muy dulces, buenos momentos y mucha salud, que al final es lo realmente importante. 

Gracias por formar parte de mi vida en este 2018 y que el 2019 nos siga trayendo estos momentos en los que compartir recetas ricas y especiales.

Un besote gigante para todos

lunes, 24 de diciembre de 2018

Pastel de queso japones FIT

Madre mía lo que llevaba en mis pendientes esta receta


Y no precisamente era su versión FIT lo que estaba en mi lista, pero mira, aprovechando que el pisuerga pasa por Valladolid, y yo que estaba buscando algo ligero y sano como postre tras la comilona de Nochebuena, pues me he topado con esto y así mato dos pájaros de un tiro


La primera y única vez que probé éste pastel fue en casa de mi prima Gelu, gran aficionada a la repostería, y nada menos que hará como 4 Navidades o así, así que al final voy a creer que la historia de este cheesecake conmigo es realmente Navideña, aunque el postre en si no lo sea... La cosa es que caí rendida a sus pies y me vine con la firme intención de hacerlo en casa


Pero ya sabéis como son estas cosas, la lista de pendientes es muy grande, y al final unas cosas van tomando mayor importancia, o el antojo es del todo ineludible y al final va pasando el montón y su momento nunca llega... Pero recuerdo perfectamente lo que mas me enamoró de él.. Esa textura como a nube que comparé irremediablemente con el Angel Food Cake... Es que esa textura me pierde


Así que cuando vi esta versión FIT no me lo pensé ni medio segundo, creo que es el postre ideal para la cena de esta noche... Algo que te guste y que sorprenda... Que no sea muy pesado porque la comilona se va a echar larga, y luego además hay que dejar hueco para los otros dulces típicos, así que, además, tenemos el añadido de poder disfrutar mas de ellos porque con este postre por lo menos no añadimos casi calorías a esa cuenta 


La receta es del blog "Fitlicioso" y la podéis encontrar AQUI. Y la única matización que hago es que ellos hablan de utilizar un molde de 16 cms... Pues yo la primera vez que lo hice con ese molde... Fallo garrafal!!!!!!!! se desbordó todo!!!!!!! y que conste que puse el papel hasta mas del doble de la altura normal del molde... No tengo ni idea muy bien de lo que pasó... Por eso esta vez no me he arriesgado y he utilizado un molde de 20 cms


INGREDIENTES

1 huevo entero talla L
3 claras de huevo
50 grs de leche en polvo desnatada
200 gr de queso untable light
1/2 cucharadita de zumo de limón
6 gr de sacarina en polvo


PREPARACION

Forramos el interior de nuestro molde con papel de horno de forma que sobresalga por lo menos al doble el papel en altura sobre el borde del molde, para que cuando suba en el horno no se desborde

Del huevo entero, separamos la yema y la clara.

En un bowl mezclamos con unas varillas la yema del huevo, el queso, la leche en polvo y la sacarina hasta que quede integrado. Reservamos

Ponemos las claras junto con el zumo de limón en el bowl de la KA y las montamos a punto de nieve a velocidad media.

Precalentamos el horno con calor arriba y abajo y temperatura de 180 grados.

Metemos en el microondas un bowl con agua caliente tres minutos para que hierva o esté a punto.


Una vez montadas las claras, añadimos 1/3 al bowl que habíamos reservado anteriormente e integramos con ayuda de una espátula y movimientos envolventes para que no se bajen. Una vez listo añadimos el otro tercio siguiendo la misma operación  y luego terminamos con el último tercio.

Pasamos la mezcla al molde y le damos unos golpes contra la encimera para que la masa llegue bien a todos los huecos.

En una fuente apta para horno ponemos nuestro molde, le añadimos 1-2 cms del agua caliente que teníamos en el micro y lo metemos en el horno en la parte de abajo para que no se queme y se haga al baño maría. Serán unos 35 minutos

Una vez pasado este tiempo. Apagamos el horno pero dejamos el pastel dentro 15 minutos mas.

Pasado ese tiempo lo sacamos y desmoldamos, le quitamos el papel de los lados con cuidado porque estará bastante delicado, dejamos la base sin quitar. Traspasamos a una rejilla para que se enfríe completamente. Entonces estará mas consistente y es cuando retiramos la base.


El resultado es una maravilla, y con un sabor a queso que se nota mucho... En estas fiestas la verdad es que no me la juego con "primeras veces" en postres, así que he hecho varias pruebas... Las he llevado al trabajo y al gym y ha triunfado de lo lindo, así que ha sido lo que me ha terminado por decantarme para que fuera mi postre de Nochebuena... Ahora no puedo esperar a probar su versión chocolateada!!!!!!!!!!!!!!!!!


He echado cuentas por encima y la tarta completa tendría en torno a las 650 calorías... Si la dividimos en 8 porciones, que siendo un molde de 20 cms creo que está bien,  nos quedaría que cada porción tiene unas 80 calorías!!!!!!!! No se puede pedir mas, desde luego

Y bueno, amigos dulces!!!!!!!! Solo me queda desearos que paséis una noche fantástica en compañía de vuestros seres queridos, que esté llena de cariño y de diversión, que comáis con mesura que no queremos terminar la noche malitos por el empacho y que si bebéis, por favor, no conduzcáis, quiero veros a todos por aquí tras la Navidad.

Un besote gigante.


lunes, 17 de diciembre de 2018

Brownie FIT de calabaza

Para mi la calabaza tiene grandes toques del otoño y de la navidad


Y está claro que es porque es una verdura de temporada, y muchas de las recetas típicas tradicionales de esta época van relacionadas con ella... Tanto dulces como saladas. Lo que no sabía es que es pariente botánica del melón, el calabacín, la sandía y el pepino, y que la planta de la calabaza es originaria del continente americano.


Existen un sinfín de variedades de calabazas, de distintos colores y tamaños (la americana, la verde española, la de violín, la de cuello torcido…). La mayoría de las piezas pesa de 2 a 8 quilos, pero hay calabazas gigantes que pueden alcanzar los 600 quilos. A pesar de tal diversidad, todas ellas comparten una pulpa dulzona, una cavidad repleta de semillas (un pequeño tesoro nutricional ya que son ricas en zinc y magnesio entre otros minerales), y una piel dura que alarga su conservación.


PROPIEDADES Y BENEFICIOS

Refuerza nuestras defensas

Mantiene en buen estado el sistema inmunitario y previene gripes y catarros.

Antioxidante

Su combinación de minerales y vitaminas convierten la calabaza en un potente antioxidante.

Cuida el sistema cardiovascular

Hipertensión arterial, prevención de la angina de pecho, mantenimiento de nivel adecuado de colesterol.

Buena para el aparato digestivo

Suave para nuestro sistema digestiva está indicada para combatir la gastritis, la úlcera gastroduodenal y el estreñimiento.


Beneficia nuestra salud ocular

La composición de la calabaza ayuda a prevenir las cataratas, la fotofobia, y la ceguera nocturna.

Cuida el aparato urinario y los riñones

La calabaza previene la cistitis, los cálculos renales, la retención de líquidos, y la insuficiencia renal.

Buena para dietas

La calabaza es un alimento rico en agua y que aporta una cantidad muy reducida de calorías a nuestro organismo. Esta verdura apenas tiene 26 calorías por cada 100 gramos, por lo que muchos dietistas la recomiendan para sus regímenes. 


Mi amiga Esther tiene una madre que es muy cocinillas, la encanta y toca todos los palos, tanto dulces como salados... Un día fué a su casa y a parte de encontrarse con un plato de lentejas que no se lo saltaba ni un gitano, de postre la pusieron este brownie. Inmediatamente se acordó de mi ya que sabe que estoy on fire probando recetas mas sanas y naturales


Así que mis "antenas" se pusieron en modo escucha en cuanto oyó "brownie de calabaza" y ya me terminó de enganchas cuando me dijo sin azúcar ni mantequilla, así que le pedí la receta a la buena mujer, que muy amablemente me dio y entonces el puré de calabaza que tenía recién hecho para hacer una de estas recetas dulces contundentes pasó a formar parte de esta receta FIT (tranquilos, la otra se ha pospuesto, no desestimado, y se que os encantará)


INGREDIENTES

1 huevo + 3 claras 
10 dátiles madjou naturales en previo remojo (8 horas mínimo)
1 taza de calabaza cocida 
1/4 taza de harina de avena 
1/4 taza de almendra molida
1/2 taza de cacao puro en polvo Valor
1 cucharadita de levadura en polvo
1 puñado grande de nueces pecanas troceadas 


PREPARACION

Precalentar el horno a 180 ° (calor arriba y abajo). Echar spray antiadherente a un molde mediano alargado (porque no sale mucha cantidad) y reservamos.

Tendrás que tener previamente preparados los dátiles secos del remojo y deshuesados y la calabaza cocida. 

En la turmix batir bien el huevo y las claras, incorporar los dátiles, y batir bien junto con el huevo hasta que se deshagan completamente. Añadir la taza de calabaza cocida y batir también. Queda una mezcla de color anaranjado de consistencia más bien líquida. 

Ponemos esta mezcla en un bowl y le añadimos la harina, las almendras molidas, el chocolate y la levadura, mezclar con ayuda de unas varillas hasta que todo esté bien integrado. 


Incorporar los trozos de nueces e integrarlos con la masa a mano con la ayuda de las varillas o de una espátula.

Volcar la mezcla sobre el molde e introducir en el horno unos 35 minutos. 

Es preferible que no quede muy hecho, así que lo de dejarlo en el horno hasta que al pinchar en el centro un palillo salga limpio no lo aplico en este caso, si lo llevas hasta ese punto quedará muy seco (ten en cuenta que no lleva mantequilla ni aceites). Intenta sacarlo un pelín antes de que llegue a ese punto, al enfriarse cogerá la textura perfecta.

Sacar del horno, dejar templar y posteriormente extraer del recipiente y dejar enfriar sobre una rejilla.


Importante: Este dulce hay que conservarlo en la nevera, al llevar ingredientes naturales (dátiles y calabaza) de no hacerlo se estropearía y sería una pena. 

En relación a las harinas (de almendra y avena) como podéis comprobar ambas suman 1/2 taza, podríais sustituir esta ½ taza por otro tipo de harina que os guste: de garbanzos, integral de trigo, de arroz... Incluso usar sólo harina de almendras así el brownie reduciría su contenido en carbohidratos e incrementaría su aporte de grasas buenas (las de la almendra) y podríais comer un trocito en la merienda si es que no queréis tomar hidratos por la tarde.


El resultado es una maravilla, si le pillas bien el truco al horno se te queda un brownie super jugoso y con una textura totalmente perfecta. Yo he de reconocer que he metido la pata y se me han olvidado las nueces... No tengo perdón de Dios... Malditas prisas... Porque un brownie sin nueces, para mi, no es un brownie!!!!!!!

Tomando nota de esto, he echado las cuentas por encima y el brownie entero tendría en torno a las 1000 Kcal, con lo que si dividís esta maravilla en 10 raciones os queda un snack de 100 calorías la mar de delicioso y chocolateado... Imposible resistirse verdad?

Y con esta receta participo en el recopilatorio de Navidad "te invito a mi mesa" de mi amigo Icake4U




Besotes

lunes, 10 de diciembre de 2018

Mantecados de Nutella

Este año he continuado con los buenos propósitos del año pasado que no llegué a completar y que me supieron a poco


Así que me he vuelto a poner manos a la masa y he seguido con mi empeño de los mantecados caseros. Si me sobra tiempo repetiré alguno de los del año pasado: limón que puedes ver AQUÍ   o chocolate que puedes ver AQUÍ,  pero en principio me encanta siempre probar recetas nuevas y novedosas para ver y descubrir distintos sabores y depurar hasta la perfección las recetas.

 
Ya sabéis que el chocolate es mi pasión, y por eso los primeros polvorones eran de eso, así que este año quería algo mas o menos del mismo sabor pero sin repetir y de ahí que me viniera a la mente la… Nutella!!!!!!!! Que hace los ojos chiribitas a grandes y pequeños por igual, no es cierto?.


Como el año pasado, me he dejado guiar por mi gran amiga Mariana, una maestra en muchas cosas, y, en especial, de los mantecados/polvorones, como podéis ver AQUÍ así que si ella recomiendo la receta de Evelyn para este menester, yo es que ni me lo pienso y voy de cabeza, y la podéis ver AQUÍ .


Mi tarea pendiente ahora es realizar los mantecados con alguna forma… Todos los que he hecho hasta ahora tienen esa forma de caramelo porque es que los de toda la vida son así, así que ver un polvorón con alguna otra forma, me choca, pero he de reconocer que quedan mucho mas curiosos y bonitos, así que habrá que innovar un poco


INGREDIENTES:

250 gr. de harina
15 gr. de cacao en polvo
120 gr. de azúcar glas
120 gr. de manteca de cerdo
100 gr. de nutella


PREPARACIÓN:

Tostamos la harina en el horno unos 20 minutos a 140º, removiendo de vez en cuando. La dejamos enfriar y la tamizamos. También se puede hacer en una sartén amplia anti adherente a fuego bajo sin dejar de remover.

Precalentamos el horno a 180º


Ponemos todos los ingredientes en un bol y amasamos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.

Damos forma a la masa de un cilindro y cortarmos con la ayuda de un cuchillo rodajas de 2 centímetros de grosor aproximadamente. Yo los compacto bien con las manos y le doy un poco esta forma de caramelo.


Vamos colocando nuestros mantecados en una bandeja apta para hornear y debidamente protegida con papel de horno. Recuerda dejar espacio entre cada mantecado.

Horneamos unos 8 minutos. Los dejamos enfriar sobre una rejilla en la propia bandeja, dejar que enfríen del todo antes de ponerte a envolverlos porque son muy frágiles mientras están calientes.


El resultado de verdad que es espectacular, puedo decir sin ningún resquicio de duda que son los mejores que he hecho hasta ahora, son mega cremosos dentro de lo que son y con un sabor bien pronunciado a Nutella.

Ya van los kilos encaminándose al trasero!!!!!!!!

Besitos

lunes, 3 de diciembre de 2018

Turrón FIT de cacahuete

Bueno, vamos allá con las fiestas navideñas!!!!!!!!


Hay algunas personas que, a pesar de que todos sabemos que vamos a realizar grandes excesos con las comidas y las bebidas en estas fechas, intentan cuidarse lo máximo posible. Y es por ello la receta con la que quiero empezar esta temporada, ya que hay que tener recetas para todos, no es cierto?.

Turrón de cacahuete? Fit? Veamos, quizá el concepto de turrón le venga un poco sobrado a esto, ya que si nos pillamos la definición de turrón vemos que no encaja con esto por ningún lado, pero bueno, como le damos esa forma…


Contrario a lo que se cree normalmente, a pesar de las grandes cantidades de grasa que contiene el maní, al ser estas de las favorables para tu salud, su consumo ayuda a tu hígado a equilibrar su funcionamiento y a tu páncreas a procesar más fácilmente el azúcar.

Además, consumir un cuarto de taza de maní al día ayuda a generar niveles altos de serotonina en el cerebro, lo que se traduce en un equilibrio hormonal y convierte al maní en un aliado natural contra la depresión.


Aún hay más beneficios. Al igual que la mayoría de los frutos secos, el maní te ayuda a calmar la ansiedad a la hora de comer y siempre será un buen amigo durante las dietas: solo una pequeña porción produce saciedad.

Y, debido a sus aceites, el cacahuete elimina colesterol malo y genera mayor cantidad del bueno, lo que ayuda a prevenir enfermedades cerebrovasculares.


Así que creo que lo mejor que tiene este turrón, es que al tomar un trozo ya nos sacia y nos deja sin ganas de mas, que es algo muy importante porque con los otros es… empezar por un lado de la bandeja y no terminar hasta que te das cuenta que están en la otra orilla de la misma.

La receta la podéis ver AQUÍ


INGREDIENTES

-500 gramos de cacahuetes (maní) crudos y sin piel.
-100 gramos de azúcar integral
-4 cucharadas de sirope de ágave
-canela
-la ralladura de medio limón


PREPARACION

Lo primero que tenemos que hacer es tostar el cacahuete. Lo ponemos bien extendido en una bandeja y horneamos a 190ºC unos 15 minutos moviéndolos de vez en cuando para que no se quemen.

Una vez tostados los trituramos bien. Podemos utilizar una trituradora, batidora de vaso, Thermomix... Lo importante es que quede lo mas polvo posible. Les añadimos todos los demás ingredientes y mezclamos hasta que quede una pasta consistente perfectamente mezclada

Luego ponemos la mezcla en nuestro molde de turrón y con la ayuda de una cuchara la compactamos muy bien. Solamente tenemos que refrigerar unos 30 minutos y listo!!!


El resultado la verdad es que está rico, se nota el toque a limón y a canela que complementan muy bien con el cacahuete… Y lo que si que es cierto es que es muy saciante.

Pistoletazo de salida para las recetas Navideñas!!!!!!!!!!!!!

Besitos


jueves, 29 de noviembre de 2018

Tarta de chocolate con un toque de sal - mi cumpleaños

Hoy es mi cumpleaños!!!!!!!!!!!!!!!!!!!


El año pasado, con toda la locura de la organización de la boda, es que no tuve tiempo para celebrarlo con vosotros como la ocasión merece, bueno, he de decir que creo que lo que falló fue mi organización, porque creo que se puede llegar a todo con tiempo y planificación, pero de esas cosas que te va pillando Paco con las rebajas y el carrito de los helados y al final...


Así que este año estoy que lo doy todo!!!!!!!! me está pasando lo mismo con la Navidad, que como no pude colocar nada de decoración porque tenía el trastero tan a tope de las cosas de la boda que me daba un perezón enorme vaciarlo para sacar lo festivo, luego volverlo a colocar, luego volverlo a sacar cuando todo pasara... En fin, un desbarajuste de caballo que hizo que la Navidad no llegara a mi hogar al final.


Eso si, la Navidad no pisa mi casa hasta que no pasa mi cumpleaños... Sé que muchos ya habéis colocado las decoraciones y tal, y yo lo respeto, pero para nosotros la fecha por tradición es el puente de Diciembre, en mi familia es el momento de la decoración... Mas bien creo que por necesidad, ya que cuando éramos canis, era el momento con mas tiempo para poder hacerlo con mas calma y luego que mis padres pudieran descansar algo gracias a esos días festivos.


Así que, por eso, vamos a ir paso a paso... Y ahora lo que toca es... SOPLAR MI VELA DE CUMPLEAÑOS!!!!!!!!!!!!!!!!! Venga..... Va.... Me ayudáis todos?


A la de unaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!! A la de doooooooooooooooooooooos!!!!!!!!!!!!!! y a la deeeeeeeeeeeeeeeeeeee..... treeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeees!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! FUUUUUUUUUU






BIEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEN!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Muchas gracias gente!!!!!!!!!! Jo, que alegría mas grande poder compartir ese momento con todos mis amigos resposteros virtuales en cuyas cocinas he pasado tantas horas y los que me han inspirado tanto y me han compartido tan buenas, grandes y deliciosas ideas.... Sois lo mas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!


Y ahora, sin mas dilación, toca hablar de la tarta elegida!!!!!!!!!!!!! estaba claro que tenía que ser de chocolate, y de chocolate a cascoporro!!!!!!! porque con este nuevo reto que me he puesto de vida en cuanto al deporte y a llevar una alimentación mas sana, pues ya que peco... Hacerlo en condiciones verdad? y cuando vi ESTA tarta de Montes, los ojos se me dieron la vuelta porque desde que sacaron el chocolate con un toque de sal me he vuelto casi adicta, me flipa esa combinación!!!!!!!!!!!!!!!

INGREDIENTES

Para la base:
32 galletas tipo Oreo
50 gr. de chocolate negro (mín. 70% cacao)
50 gr. de mantequilla derretida, atemperada
1/2 cucharadita de sal en escamas

Para el relleno:
100 gr. de chocolate negro (mín. 70% cacao), troceado
25 gr. de maicena
60 ml. de leche
500 ml. de nata para montar (mín. 35% M.G.)
50 gr. de cacao puro en polvo sin azúcar
2 cucharaditas de café soluble
75 gr. de azúcar
1 cucharadita de vainilla en extracto de vainilla de buena calidad
2 cucharaditas de AOVE (aceite de oliva virgen extra)
1 cucharadita de sal en escamas


PREPARACION

Primero preparamos la base. Ponemos el chocolate en un procesador de alimentos y lo trituramos. Reservamos. Hacemos lo mismo con las galletas: las ponemos (enteras, no hace falta quitarle el relleno) en un procesador de alimentos y las trituramos hasta convertirlas en polvo. Ahora le añadimos el chocolate reservado, la sal y la mantequilla derretida (que ya no tendrá que estar caliente o fundirá el chocolate) y trituramos todo junto unos segundos, hasta conseguir una mezcla homogénea.

Vertemos esta mezcla en el molde y repartimos bien por el fondo y subiendo un poco por las paredes del mismo. Nos podemos ayudar del dorso de una cuchara o del fondo plano de un vaso para compactarlo bien. Llevamos a la nevera al menos una hora para que endurezca bien.

Para preparar el relleno, primero disolvemos la maicena en la leche fría, removiendo bien hasta que no quede ningún grumo. Reservamos.

Ponemos en un cazo a fuego medio la nata, el chocolate troceado, el cacao, el azúcar, la vainilla, el café, el AOVE y la sal. Removemos continuamente hasta que el chocolate se funda por completo y se disuelva todo, sin dejar que llegue a hervir en ningún momento.

Retiramos un momento del fuego y añadimos la maicena disuelta en la leche. Removemos bien y volvemos a poner al fuego. No dejamos de remover en ningún momento. Cada varios minutos retiramos el cazo del fuego, removemos y volvemos a poner al fuego. Mantenemos así unos diez-quince minutos, más o menos, hasta que veamos que la crema comienza a coger consistencia y al remover se empiezan a dejar surcos en la superficie.

Retiramos el cazo del fuego y ponemos la crema en otro bol. Lo cubrimos con film transparente de forma que el film toque la superficie de la crema. Dejamos que atempere y pierda el calor.

Cuando ya esté templado sacamos el molde de la nevera y vertemos la crema sobre la base y volvemos a llevar a la nevera, para que adquiera consistencia, al menos 4-5 horas, mejor de un día para otro.

Mantenemos refrigerado hasta el momento de consumir.


Solo puedo decir que me ha sabido a gloria bendita!!!!!!!!!!!!!!!! y que no puede ser mas fácil de preparar, no tiene complicación ninguna... 

Venga, que tengo aquí un cerro de platitos... La espátula para cortar que me echa humo y deseando de compartir con todos vosotros un trocito de esta delicia para celebrarlo juntos...

Millones de besos.