Y es que ya he hecho una variante de Scones, unos de maíz y arándanos que podéis ver AQUI, pero la versión tradicional, que fue por lo que yo me puse manos a la obra, se me había quedado en el tintero y pendiente. Nada, casi 1 año después, es cuando he encontrado el momento para que viera la luz.
De origen escocés cuyo nombre proviene de la piedra del destino (the Stone of Destiny), la piedra donde se coronaba a los reyes. Hace mucho tiempo que dejó de cocinarse a la plancha para pasar a hornearse. Las posibilidades del scone son infinitas y en la cultura anglosajona se come acompañando al té (high tea) abierto por la mitad, con clotted cream (una especie de nata gruesa derivada de unas vacas que se crían en una zona determinada del Reino Unido) y mermelada de frutos rojos.
Desde los primeros scones, que se cocinaban en la plancha a base de avena y se cortaban en porciones triangulares, en Escocia han surgido múltiples variedades de este alimento: soda scones (similares al pan de soda), tattie scones (pastelitos de patata fritos que se sirven con el desayuno), drop scones (tortitas a la escocesa), bannocks (tortas de pan triangulares y planas)… Los más conocidos, sin embargo, son los panecillos redondos que se elaboran en el horno a base de harina de trigo, mantequilla y levadura en polvo, y que suelen servirse templados y abiertos por la mitad. Además de la versión básica, las panaderías y supermercados escoceses también suelen comercializar scones de frutas (con pasas, arándanos o cerezas) o de queso.
La mayoría de hogares escoceses tiene su propia receta para elaborarlos, que se transmite de generación en generación. Yo tomé prestada la de mi gran amiga y adorada Bea, del blog "Corazón de caramelo".
INGREDIENTES:
350 gr. de harina con levadura
1/4 de cucharadita de sal
5 gr. de levadura
85 gr. de mantequilla fría, cortada en cuadraditos.
60 gr. de azúcar glass
150 gr. de yogur entero
60 ml. de leche entera
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 huevo batido con dos cucharadas de leche
ELABORACIÓN:
Precalentar el horno a 200º C.
Poner juntos en un bol, la harina, la sal y la levadura y mezclar hasta que estén integrados. Añadir la mantequilla fría, cortada en trocitos y mezclar hasta conseguir una consistencia como de arena mojada.
Calentamos el yogur junto con la leche y la vainilla durante un minuto en el microondas.
Añadimos la mezcla caliente al bol de la harina y mezclamos sin amasar demasiado hasta que este todo bien integrado.
Enharinamos una superficie y extendemos la masa, procurando no amasarla más de la cuenta porque de lo contrario, nos quedarían los scones como piedras.
Formamos un rectángulo (puedes utilizar el rodillo, aunque es mejor hacerlo con las manos para que la masa suba sin problemas en el horno) de aproximadamente 2/3 cm. y con un cortapastas (lo enharinaremos cada vez que cortemos un scone) vamos formando los scones. ( En este caso yo he utilizado un cortapastas con forma de corazón). Los vamos colocando sobre papel de hornear en la bandeja del horno.
Con ayuda de un pincel, untamos cada scone con la mezcla del huevo con la leche e introducimos en el horno durante aproximadamente 12 minutos o hasta que estén doraditos.
Al no ser muy dulces, los podéis acompañar, o bien con un poco de queso fresco y jamón o membrillo, o bien como se consume originalmente, con mantequilla y un poquito de mermelada.
Yo prefiero tomarlos con mantequilla y mermelada, para desayunar, por eso hoy os traigo un post super completito, ya que os voy a dejar la receta de las dos mermeladas que tengo en el frigo para tomar.
Yo no hago proceso de envasarlas para conservarlas, mas bien es un truqui de la abuela, cuando la mermelada está lista y todavía caliente, relleno los botes de cristal previamente lavados, vierto la preparación hasta medio centímetro por debajo del borde del bote, tapo los botes y los pongo boca abajo hasta que enfrían por completo.
De todos modos si queréis tener unas directrices para envasarlas mucho mas profesionales, AQUI os dejo los consejos y los pasos que nos da Bea para ello.
Mermelada de cereza
Ingredientes:
400 gr. de cerezas deshuesadas
200 gr. de azúcar blanco
1 tablespoon (15 ml.) de zumo de limón
Lavar y deshuesar las cerezas. Una vez limpias deberán pesar 400 gr.
Trocear las cerezas en cuatro trozos y ponerlos en un cazo. Añadir el azúcar y el zumo de limón. Calentar a fuego medio-alto y dejar hervir, removiendo de vez en cuando y desespumando, hasta que la mermelada esté hecha (25-30 minutos). Si tenéis un termómetro deberá marcar 104ºC.
Una vez la mermelada esté hecha, poner la mermelada en un tarro de cristal esterilizado. Dejar templar.
Los trozos de cereza todavía serán apreciables. Si la queréis sin trozos siempre podéis triturarla como paso final.
Mermelada de melocotón
Ingredientes:
1 kg de melocotones
800 gr de azúcar moreno o azúcar blanco
4 cucharadas de zumo de limón
Comienza escaldando los melocotones en agua hirviendo para retirar su piel con facilidad. A continuación, quita el hueso de cada melocotón y trocéalo.
En un cazo, dispón el melocotón troceado con el azúcar moreno o el azúcar blanco y déjalo en reposo unos minutos.
Pon a cocer, a fuego lento, el recipiente con el melocotón, el azúcar y el zumo de limón.
Remueve hasta que el azúcar se haya disuelto; deja que la preparación cueza hasta que adquiera textura de mermelada. Mezcla de vez en cuando para evitar que se pegue al fondo.
Cuando la mermelada de melocotón esté lista, rellena los botes de cristal previamente lavados.
Y ya os dejo hoy, que al final con las tres recetas esto se está haciendo mas largo que un día sin pan.
Yo me voy a disfrutar de este estupendo desayuno, totalmente casero y la mar de britihs.
La tabla es de Muy mucho por muy poco, el plato y la servilleta es de Zara home, la copa mas alta (mermelada de melocotón) y la mas baja (mantequilla) son de Maisons du monde, la copa mediana (mermelada de cereza) es de Green Gate y el brick de porcelana es de Tape pink.
Un besote gigante y.... Que Dios salve a la reina!!!!!!!!!!!!!!!!!!
mmmm como me gustan los scones, son de mis panecillos favoritos!!!!!! me ha gustado mucho Olga, me voy a guardar tu receta porque yo los preparo mucho en casa, un beso amiga
ResponderEliminarA mi es una de las cosas que mas me gustaron del tiempo que viví all´ñi... Esto y los baggels son mis dos grandes descubrimientos del mismo tipo.
EliminarEspero que tengas un gran fin de semana preciosa.
Un besote
Nunca los he hecho pero que pinta tienen!! y con las
ResponderEliminarmermeladas una merienda con triunfo asegurado.
Besos
No te digo na!!!!!!!! sírvelo con un té y ya..... British total!!!!!!!!!!!!! jajajajajaja
EliminarBesitos
que hambre me entro ahora mismo,umm
ResponderEliminarY esto no es dulce, eh?
EliminarBesos
Cuando digo que eres puro amor me quedo corta, de eso soy consciente y espero poder algún día transmitirte toda la admiración que te tengo como la GRANDISIMA persona que eres querida Olga. Enamorada me he quedado de tus scones y por supuesto de tus ricas mermeladas, pedazo de desayuno más bien hecho :-) #ailoviu
ResponderEliminarTodo ello viene motivado por ti, mi querida Bea, así que ya sabes, gran parte de todo esto es el reflejo de tí misma y la maravillosa mujer y amiga que eres.
EliminarNo te puedes ni imaginar lo que te echo de menos, pero aquí estaré cuando acabes con esta etapa tan emocionante de tu vida.
Un besazo
Une de mes recettes favorites.
ResponderEliminarEs que están de rechupete.
EliminarBesines