Pound Cake muerte por chocolate

Estoy totalmente enganchada a los Pound Cakes

Y después de probar el Pound Cake de queso del que os hablé AQUI se me encendió una bombilla. Quería utilizar esta receta como base, ya que quedaba tremendamente jugosa y esponjosa, pero ahora le quería dar un sabor diferente, y como sale cantidad para dos moldes, así podía probar dos cosas.

Ya lo sabéis mas que de sobra, soy una chocoadicta mas que reconocida, así que estaba claro que mi primera opción iba a ser esta. Y se me vino a la mente ese tremendo Bundt Cake muerte por chocolate del que os hablé AQUI, y decidí hacer lo mismo pero en Pound Cake.

Y es que Martha Stewart está siendo mi perdición, desde que me regalaron su libro no puedo dejar de hacer cosas de ella... Me tiene absorbido el coco totalmente... La receta original del Pound Cake de queso la podéis ver AQUI

Como ya os he dicho, salen dos moldes con esas cantidades, así que yo lo que hice fué dividir la masa en dos. Lo que hice con la otra ya os lo enseñaré un poco mas adelante, vais a tener que contener un poco vuestra curiosidad

A esta mitad de la masa lo que le añadí al final fueron dos cucharadas soperas de cacao en polvo sin azúcar añadido valor, y mezclé muy bien. Luego pasé 100 gr de chips de chocolate por harina, y los incorporé a la masa con una lengua. El truqui de la harina es para que no se vayan directamente al fondo.

Y para darle el toque ya de gracia, y que fuera una auténtica muerte por chocolate, lo cubrí de un glaseado de chocolate que me tiene loca de amor, lo primero por el sabor, ESPECTACULAR, lo segundo por la textura... Como la cobertura de los donuts fondant, y lo tercero por lo fácil y rápido que es de hacer. Lo podéis encontrar AQUI

Que puedo deciros del invento, el resultado es asombroso y delicioso. A la base jugosa y esponjosa del pound cake de queso se le une el sabor a chocolate... Pero no queda empalagoso, porque como sabía que iba a llevar bastante, tampoco quise recargar la masa con mucho chocolate en polvo... que es muy fuerte

Al morder, lo primero que te encuentras es la textura de esa cobertura... Un pelin dura por fuera, pero luego cremosa por dentro. Llegas al bizcocho que está tierno, casi que se deshace en la boca, y te vas encontrando esos chips de chocolate que es como un extra de sabor añadido

Otra cosa muy buena que tienen los pound cakes es que si los conservas en condiciones te aguantan perfectamente bastante tiempo, como una semana, con la misma textura y esponjosidad. Yo los envuelvo con film transparente y los meto en una lata, así me han llegado a durar incluso mas.

Aquí tenéis el corte... A día de hoy todavía se me dan la vuelta los ojos.

El pañito y la jarrita son de Green Gate, la fuentes es de Westwing, el bote de cristas es de Maisons du monde y las flores son de Etsy.

Un besito relamiendome todavía